Evonik y Beiersdorf inician investigación conjunta para transformar dióxido de carbono en productos de cuidados personales

Beiersdorf y Evonik firmaron un acuerdo de asociación de investigación que tiene como objetivo desarrollar materias primas sustentables para su aplicación en productos de cuidados personales utilizando dióxido de carbono (CO2) como insumo inicial.

Beiersdorf está en búsqueda de nuevas fuentes de materias primas que también contribuyan con la reducción de la huella de carbono de la empresa. Una de las opciones para eso es la tecnología de fotosíntesis artificial. La idea: con la ayuda bacterias y de la electricidad proveniente de la energía solar, valiosas materias primas son producidas con agua y CO2, teniendo como modelo la fotosíntesis natural. El proyecto de investigación conjunta entre Evonik y Beiersdorf es financiado por el Ministerio Federal Alemán para la Educación e Investigación (BMBF), que asignó alrededor de 1 millón de euros para la iniciativa.

Dra. May Shana'a, Corporate Senior Vice President Research and Development, de Beiersdorf, expresa: “La cooperación en investigación se adapta perfectamente a nuestra agenda de sustentabilidad, es un ambicioso programa que estamos implementando sistemáticamente y que abarca todas las funciones. Nuestra búsqueda es hacer con que la empresa sea positiva desde el punto de vista climático, y también contribuir para cerrar el ciclo del carbono”. Si Beiersdorf tiene éxito en el uso de CO2 como fuente de las materias primas utilizadas en sus productos de cuidados personales, la compañía podrá reducir su huella de carbono y la cantidad de tierras utilizadas para recursos renovables. "Junto con Evonik, estamos determinando qué materias primas se pueden producir con la ayuda de la fotosíntesis artificial y que serían potencialmente adecuadas para nuestros productos de cuidados personales. Aunque esto ya se observó en una etapa temprana en varias otras industrias, en la cosmética la aplicación aún está dando sus primeros pasos. Es por eso que estamos especialmente orgullosos del establecimiento de esta asociación de investigación”, agrega Shana'a.

Thomas Haas, responsable del campo de la fotosíntesis artificial en Evonik, dice: "Con el uso del dióxido de carbono como insumo inicial en la producción de valiosas materias primas, podemos cerrar el ciclo del carbono, exactamente como lo demuestra la fotosíntesis natural". Evonik está desarrollando la plataforma tecnológica necesaria para la fotosíntesis artificial junto con Siemens en el proyecto Rheticus, también respaldado por el BMBF. Evonik cree que la cooperación en investigación recientemente iniciada con Beiersdorf, especialista en productos para el cuidado de la piel, que es independiente de la cooperación entablada con Siemens, representa una oportunidad para que la fabricante de especialidades químicas expanda el futuro portfolio de productos para fotosíntesis artificial. “Con Beiersdorf, tenemos un socio que se une a nosotros con el objetivo de expandir la cadena de valor a fin de incluir productos sustentables basados en CO2, para el interés del consumidor ", agrega Haas.

Con este proyecto de investigación, Beiersdorf y Evonik son socios en el proyecto BMBF P2X II, lanzado en septiembre de 2019 y que forma parte del programa Kopernikus, una de las mayores iniciativas de investigación alemanas en el campo de la transición energética. El proyecto P2X II ya involucra a 42 miembros. El objetivo es desarrollar procesos que usan energía renovable para producir productos de alta calidad.